a. Hospitalización de más de cuarenta y ocho horas, que se inicie 
  el plazo de siete días a partir de la fecha en que se sufrió la 
  lesión
  b. Rotura de cualquier hueso (excepto fracturas simples de dedos de las manos 
  o de los pies, o de la nariz)
  c. Laceraciones que causen hemorragias graves o daños a los nervios, 
  músculos o tendones
  d. Lesiones de cualquier órgano interno
  e. Quemaduras de segundo o tercer grado, o quemaduras que afecten a más 
  del 5% de la superficie corporal
  f. Exposición comprobada a sustancias infecciosas o a radiaciones perjudiciales.